"I Should Have Known the Things You Never Said" de Icarus Phoenix
Icarus Phoenix, la banda de Baltimore que ha construido una base de seguidores fieles con su estilo único de folk alternativo, ha lanzado su cuarto álbum de estudio titulado "I Should Have Known the Things You Never Said". Este trabajo es el resultado de años de esfuerzo, no solo en términos de producción musical, sino también en el proceso emocional que llevó a su creación. Grabado en Provo, Utah, bajo la producción de Jed Jones, conocido por su trabajo con Post Malone y The Killers, este álbum refleja un periodo en la vida del líder de la banda, Drew Danburry.
El álbum destaca por su instrumental, donde las guitarras acústicas y eléctricas se entrelazan en una danza melancólica. La batería, a cargo de Andrew Young, y el bajo, de Justin Pacheco, crean una base rítmica que, aunque sólida, se siente frágil, como si pudiera desmoronarse en cualquier momento, reflejando la vulnerabilidad emocional presente en las letras. La colaboración de Jake Bellows en la guitarra adicional y las capas de ruido y ambiente aportadas por Chaz Prymek y Rocky Cordray añaden texturas que enriquecen el paisaje sonoro.
"The Things You Never Told Me" abre el álbum con una reflexión sobre las cosas no dichas en una relación. La melodía, acompañada por una guitarra acústica suave, se siente íntima y sincera. Letras que exploran la frustración y el dolor que surge cuando las palabras que podrían haber cambiado todo nunca se pronunciaron. "Live. Give. Lose. Grow" se distingue por su ritmo más optimista en comparación con el tono melancólico del álbum. La letra habla sobre la inevitable pérdida y cómo, a pesar de todo, seguimos creciendo y aprendiendo.
"Doctor! Doctor!" Una de las canciones más personales del álbum, canción de la cual ya tenemos una reseña (Reseña "Doctor! Doctor!") La instrumentación es minimalista, lo que permite que las letras ocupen el centro del escenario. A medida que avanza la canción, se siente un crescendo emocional, reflejando la desesperación y la búsqueda de razones para continuar. "Hatillo 2" la instrumentación es rica en texturas, con capas de sonidos que crean un ambiente envolvente. Esta canción es un claro ejemplo de cómo la banda juega con la sonoridad para evocar sentimientos complejos. "Kanashimi", cuyo título se traduce como "tristeza" en japonés, es una colaboración con la banda Lake Mary. Las letras en japonés y la interpretación vocal me transportan a un espacio reflexivo, donde la tristeza se convierte en un lugar para la reflexión.
"When it’s time to go" (I don’t know if it is) Cerrando el álbum, esta canción es una meditación sobre el final de las cosas, ya sea una relación, una fase de la vida o algo más profundo. La melodía es lenta y contemplativa, con una instrumentación que sugiere un sentimiento de incertidumbre. Las letras capturan la ambigüedad de no saber cuándo es el momento adecuado para dejar ir.
"I Should Have Known the Things You Never Said" es un álbum que captura la esencia de la lucha interna, el dolor y la eventual aceptación. La banda ha logrado convertir un periodo difícil en una obra de arte que resuena con cualquiera que haya enfrentado la pérdida y el cambio. Sin duda, este trabajo consolida a Icarus Phoenix como una banda que merece ser escuchada y apreciada.
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